VIAJE A TERUEL.

A las 6:30 de la mañana salíamos rumbo a Albarracín, y en Motilla hicimos nuestra primera parada.

La segunda se hizo en un pueblo llamado Libros, al que llegamos después de muchas curvas y algunos mareos.

A nuestra llegada a Albarracín, que parecía que no iba a llegar nunca, y como teníamos tiempo libre, visitamos una zona de pinturas ruprestres, aunque algunos de nosotros no fuimos capaces de distinguirlas entre las rocas.

La comida, en un pintoresco  y pequeñito hotel de Albarracín, donde pudimos descansar y prepararnos para la visita guiada.

¡¡Ya teníamos ganas de sentarnos a descansar y  a comer, que el estómago ya se quejaba!!

Muy bueno el entrecot de ternera.

En  Teruel pueden presumir de buenas carnes y embutidos, todo el jamón que probamos en diferentes sitios era extraordinario.

¡¡Buena mesa ésta!!! ¡¡Cómo disfrutan!!

Algunos, como siempre, caen antes que otros.

Lo primero fue una subida, aunque Ramón, nuestro conductor, hizo lo posible para que no andáramos mucho.

El pueblo más bonito de España. Unas vistas  preciosas de la muralla que rodea esta parte del pueblo.

Las calles, casi todas de este estilo.

La plaza Mayor, donde se celebran las fiestas.

Fijaos en la esquina tan curiosa.

Las fotos de grupos a la llegada al centro de inforción turística.

Nos vamos para Teruel, duchita fresca y cena en el hotel.

Todos guapos para cenar,  y para salir a tomar unas copitas. ¡Tiembla Teruel, que los villorreños vamos para allá!

Mari Carmen y Pedro, como dos novios en un pub.

No nos gustó demasiado el primer sitio donde estuvimos, la música no era lo que buscábamos, por lo que nos fuimos buscando un local que nos recomendaron.

'¡Esto es otra  cosa!

A dormir que mañana a las 10 y media hemos quedado con la guía para que nos enseñe Teruel.

Monumento en recuerdo a los amantes de Teruel. Bonita historia la de esta pareja,

Vimos muchas torres de este estilo, el mudéjar.

La plaza del Torico, que como su nombre indica es pequeñísimo.

Descansando y hablando con los lugareños.

Más torres mudéjares.

Foto de grupo con la guía. Teruel, pequeño pero con encanto y el clima fue muy agradable.

La comida en el hotel antes de marcharnos para Villamanrique.

Nuestro amigo Fernando tan servicial como siempre, sirviendo las copas de champán con las que brindaríamos para volver a vernos todos el próximo año en otro lugar.

Despedidas y abrazos entre amigos y con la pena de que acabara el fin de semana.

Tuvimos un pequños detalle para Ramón, el conductor del autobús, por lo bien que se portó con nosotros  y por la paciencia que tiene con nosotros, que somos más folloneros que un autobús de estudiantes en la edad del pavo.

Aquí, recreando la visita que tuvo que hacer Javi Selas al servicio de Urgencias por la mañana para que le solucionaran la indisposición que tenía a la hora de levantarse, se perdió la visita y el cañeo por Teruel., la próxima vez nos acostamos más temprano.

Ya en el autobús, de  vuelta a casa.

Hasta el próximo año¡¡¡