Esta vez le ha tocado a la tradicional sopa de ajo, pero esta vez Pablo, nuestro profesor, le ha dado unos toques más innovadores para hacer de esta receta algo más moderno.
A continuación, os traslado el modo de elaboración, pues los ingredientes van surgiendo y son pocos y sencillos...
Sofreímos en aceite 3 dientes de ajo y taquitos de jamón. Cuando lleve un rato sofriendo le añadimos tomate natural para colorear el caldo. El pimentón es opcional, en este caso no lo hemos puesto. Regamos con caldo de cocido o de pollo y ponemos a hervir.
Mietras, cojemos una cabeza de ajos entera y la tostamos en el fogón de la cocina, hasta que se oscurezca, y reservamos un diente de esta cabeza, pero con la piel ennegrecida.
La cabeza de ajos tostada la añadimos al caldo y dejamos todo cocer..
Le añadimos un toque de cominos.
Vamos poniendo un poquito de pan tostado para ir ligando el caldo y removemos.
Cuando ya casi esté lista, escalfamos huevos de codorniz en el caldo, y... ya está, pero el sabor no os podeis imaginar cual era...¡RICO, RICO!
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